Finca raíz, la inversión que nunca pierde valor

Tomada: eltiempo.com La finca raíz ha sido históricamente una opción de inversión preferida por los colombianos, y…

Tomada: eltiempo.com

La finca raíz ha sido históricamente una opción de inversión preferida por los colombianos, y la vivienda es en primer lugar el tipo de inmueble más solicitado.

Lo anterior indica que la inversión en finca raíz en Colombia no para. Tanto para inversionistas privados como para los hogares continúa siendo una opción importante donde los activos se valorizan, dependiendo el segmento, a riesgo moderado y con un potencial de rentabilidad importante.

Cuando se adquiere finca raíz, el activo no solo se valoriza, este recibe rentas mensuales haciendo de su rentabilidad, un factor positivo.

La finca raíz es la mejor inversión porque da seguridad, manteniendo el valor del dinero en el tiempo, está cubierta frente a las devaluaciones y es la inversión que no se desvaloriza. No obstante, con el nacimiento de las nuevas generaciones, a quienes no les afana ser propietarios sino tener un estilo de vida de mayor flexibilidad económica, surge la inquietud de si la finca raíz, al menos en el segmento de vivienda, continúa siendo un buen negocio.

Las expectativas de crecimiento para el sector de finca raíz son pocas, aun cuando los últimos tres años se han creado varios fondos de inversión de capital privado para el desarrollo inmobiliario. Y es que esta es una división del mercado sensible a los cambios macroeconómicos, la inflación, el consumo y el empleo son factores fundamentales para los inversionistas.

“Los periodos de inflación baja son buenos momentos para invertir en general en finca raíz. Por su parte, la empleabilidad de las personas define, por un lado la demanda de espacios tanto de oficinas y parques industriales, y por otra, el consumo, generando mayor demanda lo que jalona directamente los momentos importantes para la inversión”, señala Mauricio Montañez, director de valuación y consultoría de Colliers International Colombia.

Segmentos en auge

Los locales comerciales, hoteles y depósitos, son los activos inmobiliarios más rentables, no obstante, dentro del mercado son los más riesgosos debido a que su renta es variable. Dice el Director de valuación y consultoría de Colliers International Colombia: “son activos cuyo costo de adquisición son una oportunidad, debido a sus procesos de disposición lo que genera mayor oportunidad de rentabilidad, aun cuando requieran inversiones adicionales a la propiedad e inversión comercial más fuerte”.

Para ser más asertivos en la inversión es importante tener un conocimiento mínimo de cada sector, con el fin de prever temas como los ciclos de oferta – demanda, mejores sectores y ciudades en desarrollo.

Para tener en cuenta al momento de invertir

Los expertos señalan que lo más importante es definir el tipo de riesgo que se puede o desea asumir. “Al momento de invertir en un activo inmobiliario es importante tener en cuenta tres factores que van asociados a la rentabilidad del mismo, como la propiedad, el inquilino y las condiciones del contrato”, añade Montañez.
El primer factor se refiere a las condiciones de mantenimiento del inmueble, las buenas especificaciones localizadas, no contar con mantenimientos diferidos o pendientes por ejecutar y garantizar el estado de conservación de la propiedad a futuro. El segundo, consiste en conocer y entender el negocio del inquilino, los indicadores del sector en el cual se desenvuelve la empresa, los estados financieros y la solvencia económica, clave para conocer el riesgo de permanencia y de retorno de rentabilidad.

Por último, considerar las condiciones del contrato permite establecer las rentas, las cuales deben estar alineadas al comportamiento del mercado, los deberes y obligaciones por ambas parte del contrato y beneficios.

Cuando se trata de inmuebles residenciales, la inversión será segura, ya que aunque la renta directa sea baja, los puntos claves como la ubicación en sectores de arriendo para ejecutivos y/o estudiantes, compensarán y nivelarán los gastos.

Como recomendación final, se sugiere reconocer las etapas del ciclo inmobiliario y buscar comprar activos que se encuentren en sobreoferta o en recesión. Por el contrario, si están en fase de expansión no es tan aconsejable invertir, ya que la rentabilidad se ve comprometida.